domingo, 9 de octubre de 2022

Recuerdo imborrable


Aquel día, recuerdo ir a unos grandes almacenes para comprarle algo muy especial.Quería sorprenderla.
Cogí un precioso pijama con pantalón, nunca los habia usado asi, y pense que le gustaría. 
Solía taparse las piernas con su mantita porque se le quedaban frías de tantas horas sentada en su butaca.
Cuando se lo entregue pude ver su cara de asombro y a la vez de felicidad. Le había gustado.
Se dirigió a su habitación, pensé que iba a guardarlo, pero cual fue mi sorpresa cuando se presentó ante mí con el pijama puesto sonriendo como una niña pequeña.
Nos reímos largo rato,poseía un gran humor, y bromeaba sobre su apariencia.
Tenía por costumbre antes de ir a dormir, rociar su ropa con un agradable perfume a jazmín y a mi me gustaba abrazarla para sentir su olor.
Aquel pijama llego a perder casi todo su colorido, pero ella seguía usándolo y a mí me gustaba verla.
Así, cuando se marchó y pude abrir su armario, allí estaba con aquel encantador perfume que hizo que, por un momento, volviera a estar a mi lado.
Su ropa fue entregada a personas necesitadas y familiares, pero era imposible desprenderme de aquella prenda, así que la guarde en un cajón junto al resto de perfume que aún quedaba.
Con frecuencia, rocío la prenda con aquel perfume y la aprieto contra mí sintiéndola cerca.
A veces pienso haber perdido la conciencia, otras que es simple necesidad de sentir al menos su olor, un recuerdo imborrable que anida en mi corazón.